Poetas: Antonio Revert, Inma Luna, José María García Linares
Músicos: Tomás Vera, Kakó.
La Coordinadora Anti Represión de la Región de Murcia lanza "Contra. Poesía ante la represión", una antología de poesía que recoge las voces críticas de un centenar de poetas de un lado y otro del océano. La obra constituye un collage poético colectivo contra todos los tipos de represión que sufre nuestra sociedad y cuenta con las firmas más consolidadas de la poesía de la conciencia crítica actual, como la de Antonio Orihuela, a cargo del prólogo, Jorge Riechmann, Cristina Morano (que también ha diseñado la edición), Juan Carlos Mestre, Ana Pérez Cañamares, Alberto García-Teresa, David González, Isabel Pérez Montalbán o David Trashumante, José María García Linares, Antonio Revert, Inma Luna y muchos otros.
La publicación trata de llevar el compromiso contra la represión al campo de la cultura, en un momento en que ésta se encuentra en el frente de una batalla por la hegemonía ideológica. La ola de detenciones y procesos judiciales contra nuestros creadores demuestra que la palabra y el arte siguen siendo un arma especialmente peligrosa para el Poder establecido, y creemos llegado el momento de declarar la insumisión poética al decreto de silencio.
Dispondremos de ejemplares del libro para su venta.
CONTRA. POESÍA ANTE LA REPRESIÓN es una antología que recoge las voces críticas de más de un centenar de poetas de un lado y otro del océano. Un collage poético colectivo contra todos los tipos de represión que sufre nuestra sociedad y que cuenta con las firmas más consolidadas de la poesía de la conciencia crítica actual.
Uno de los poemas del libro, La pesadilla que se muerde la cola, de Alejandro Ruiz Morillas, recoge la siguiente cita de Naomi Klein: “Lo que no se dice de la tortura es que funciona”. Y Klein tiene razón, su frase es tan cierta como aterradora.
La actual Ley Mordaza es el abono necesario para una sociedad acrítica y rendida. La impotencia que produce la Ley Mordaza tiene un componente de tortura psicológica. El mecanismo que impide que podamos manifestarnos libremente es un acto humillante y peligroso para cualquier democracia, porque puede conseguir —y de hecho, ese es su objetivo— que nos acostumbremos a la impotencia.
"La publicación trata de llevar el compromiso contra la represión al campo de la cultura, en un momento en que ésta se encuentra en el frente de una batalla por la hegemonía ideológica. La ola de detenciones y procesos judiciales contra nuestros creadores demuestra que la palabra y el arte siguen siendo un arma especialmente peligrosa para el Poder establecido, y creemos llegado el momento de declarar la insumisión poética al decreto de silencio", afirman desde la Coordinadora.
“ Cuando no hay movimiento fuera, la historia ocurre dentro”, dice Chantal Maillard,
Dentro sí, pero de la jaula, le responde Ruiz Morillas.
Es fácil imaginar la poca libertad que conceden las jaulas a la vida.
El libro está dedicado a Patricia Heras, un ejemplo de la eficacia de la represión y de su aliado, el silencio. Patricia Heras fue detenida en Urgencias del Hospital del Mar de Barcelona la noche del 4 de febrero de 2006 tras sufrir un accidente de bicicleta. Por su corte de pelo y su indumentaria, fue confundida con una activista del movimiento okupa y acusada de incidentes en los que fue herido un guardia urbano.
Patricia no había participado en los sucesos ni formaba parte del “movimiento okupa”. Fue condenada a 3 años de prisión, al igual que otras personas detenidas esa noche. Durante mucho tiempo fue imposible hablar del caso. Una mordaza piramidal que empezaba con la guardia urbana, seguía con la prensa y acababa con el alcalde de Barcelona, Joan Clos, hizo imposible saber la verdad. En abril de 2011, durante un permiso penitenciario, Patricia Heras no aguantó la presión y se tiró por la ventana.
Ahora, varios años después, ha salido a la luz toda la verdad, la inocencia de Heras, de las personas detenidas y la culpabilidad de los agentes de la guardia urbana y del propio alcalde. Pero Patricia no está para disfrutar de su vida. Durante años, la tortura y la mordaza funcionaron, hasta que un grupo de gente y una película, "Ciutat morta", decidieron romper el silencio.
Este libro pretende también romper el silencio, rasgar la mordaza. Además de los tres aragoneses ya citados, han participado Jorge Riechmann, Katy Parra, Juan Carlos Mestre, Ana Pérez Cañamares, David González, Isabel Pérez Montalbán Antonio Orihuela, Gus Bonilla, Isabel Bono, Andrea, Elsa López, Uña, Marcos Ana, Felipe Zapico, Iván Rafael, Enrique Falcón, David González, Patricia, Ana Montojo, Nuria Ruiz de Viñaspre, Antonio Revert, Jose María García Linares y muchos más.
